Así lo anunció el presidente Alberto Fernández en una conferencia de prensa. El mandatario informó que se llevará al Congreso un proyecto para su expropiación, que actualmente está en concurso de acreedores.
Fernández explicó que el Estado se haría cargo del 51% de la compañía, que se encuentra “camino a la quiebra” por una deuda de USD 350 millones que la empresa agroexportadora tiene con el Banco Nación, sobre una acreencia total de USD 1.350 millones.
De todas formas, el debate llegará a la legislatura donde se tratará el proyecto formal de expropiación: “dispusimos la intervención del Grupo Vicentín y enviamos al Congreso una ley de expropiación para garantizar el funcionamiento de la compañía y los puestos de trabajo”, publicó en un tweet el presidente.
Según informaron desde el gobierno, los principales objetivos de la expropiación de la compañía exportadora de cereales son la recuperación y pago de deudas a productores de interior, la renegociación con los bancos acreedores y paz social y estabilidad laboral con gremios.
Por último, el jefe de estado manifestó al respecto: “los argentinos tenemos que estar muy contentos porque estamos dando un paso hacia la soberanía alimentaria”, ya que luego de la pandemia los alimentos estarán en el centro de la discusión.