El delantero de San Lorenzo esta arreglando su salida del club pero todavía no se sabe si se quedara en el país o emigrara a otro mercado.
Comenzó la novela del vera no y como siempre nos tiene acostumbrados los protagonistas son los dos equipos más grandes del país, Boca y River se pelean por contar con los goles del goleador paraguayo.
“No sé qué va a ser de mi futuro. Lo que sé es que disfruté al máximo con esta camiseta, estoy muy feliz” esto fue lo que declaró el futbolista después de la clasificación de octavos de final de la Copa Libertadores.
Producto de estos dichos los clubes con más poder adquisitivo olieron sangre y se acercaron para ver si podían hacerse de los servicios de Adam para lo que resta de la temporada. Primero llego una charla del conjunto millonario y más tarde la del conjunto Xeneize.
“Es difícil centrarse en los aspectos personales cuando hay tantos rumores detrás” estableció el jugador que en estos momentos está representando a la selección de Paraguay para los amistosos previos a la Copa América.
La baja clausula es lo que sedujo a ambos clubes aunque es muy cara para el mercado local, estuvo a un paso de emigrar en la anterior ventana de transferencias, pero el jugador permaneció en el plantel porque ningún ofrecimiento, entre ellos el de Athletico Paranaense de Brasil, alcanzó la cláusula de ese momento, fijada en USD 7.000.000.
Producto de esto firmó un nuevo contrato hasta diciembre del 2025 con una rebaja de 50% en la cláusula de salida, también tiene propuestas de equipos brasileños pero hasta el momento está enfocado en la Copa América.