En Radio Búnker se habló de la situación de la pandemia y los números de casos en nuestro país que bajaron en las últimas semanas, sin embargo la enfermedad sigue circulando. El análisis y la lectura de este momento lo realiza Soledad Retamar, integrante del Grupo de Investigación en Bases de Datos (GIBD) de la Facultad Regional Concepción del Uruguay de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN): “Si bien los casos están bajando, a un ritmo lento pero están bajando, pero a esta altura del año lo que nos tenemos que proponer para afrontar lo que queremos realizar, reforzar los cuidados para llegar a un otoño en mejores condiciones”.
En diálogo con el Tanke de Búnker, la docente e investigadora expresó: “Esta situación que se dio durante fin de año, el crecimiento tan brusco que apareció en los casos, en base a las fiestas, actividades sociales y turismo, imagínense lo que puede llegar a ser una movilidad al casi cien por ciento a partir de clases presenciales, actividades deportivas que se van habilitando, de una serie de eventos que implica que las personas interactúan con grupos de personas fuera de sus burbujas. La vacuna será una herramienta que permitirá algunas aperturas con un poco menos de riesgo como fue el año pasado cuando estaba tan negro el panorama sin una vacuna a la vista. De todos modos, lo único que tenemos hoy en nuestras manos para contrarrestar todo esto es reforzar los cuidados”.
La investigadora se refirió al tema de las fiestas clandestinas y qué le genera a ella como personal de salud: “En lo personal me da mucha pena, no es sólo el foco de contagio que se puede llegar a ocasionar sino también es el mensaje que se transmite de una idea de que el virus ya pasó, de que hay una normalidad similar previo a la pandemia y digo todo el esfuerzo que se realizó, desde lo económico y lo social, con eso no se está aportando como sociedad a volver a una normalidad para la mayoría. Yo siempre pienso que esos jóvenes que están en esas fiestas deben tener un familiar mayor o con alguna persona de riesgo. Está faltando responsabilidad individual y conciencia social en esos casos”.
Sobre por qué cree que pasan estas cuestiones, la especialista explicó: “Hay una cuestión que pasó a nivel mundial con la pandemia es que muchas cosas se desconocían. De hecho todos los que comenzamos a estudiar lo que ocurría con la enfermedad a nivel mundial, hemos cambiado de opiniones en base a experiencias o vimos que no tenían el impacto que podrían tener algunas cuestiones. Por ejemplo, una de las cosas que se ha desestimado mucho desde el principio, inclusive en la comunicación oficial, es el tema de los ambientes cerrados y el aire acondicionado, que el virus se transmite en esos casos y no se le da la misma importancia a esos tipos de medidas que al lavado de manos y demás”.