Comienza un fin de semana largo en celebración de Semana Santa, en acto a la creencia de la religión católica y cristiana sobre la resurrección de Jesús en Jerusalén.
Durante toda la semana, comienza la cuenta regresiva hacia el tan ansiado día de pascuas. Este día distintivo para católicos conmemora la entrada triunfal de Jesús a Jerusalén, dónde todos lo alababan como a un rey.
El inicio de esta semana santificada se da el Domingo de ramos, día en el cual Jesús llega a Jerusalén rodeado de todos sus fieles. Según los textos, Jesús entró en la ciudad santa montado en un burro que él mismo mandó soltar a dos de sus discípulos de un pueblo cercano.
Al pasar de los días varios son los sucesos que se establecen en el mundo religioso. Comenzando con el Lunes Santo y la presencia de Jesús en casa de Lázaro. Además, se recuerda que fue el día que Jesús expulsó a los mercaderes del Templo de Jerusalén.
El Martes Santo se recuerda por la traición de Judas y la negación de Pedro hacia el mensajero de Dios. El Miércoles Santo se recuerda por la reunión de Judas con el objetivo de planear la traición a Jesucristo a cambio de treinta monedas de plata.
Por parte del jueves Santo se trata de de la última cena. Al final de la comida, Jesús iría a orar al Monte de Olivos y sería identificado por Judas y aprehendido por los sacerdotes y miembros del Sanedrín. Viernes Santo se conmemora la pasión de Cristo, así como su crucifixión y, finalmente, su muerte. Algunos católicos ortodoxos hacen ayuno y no comen carne durante este día.
Finalmente el sábado es un día de luto para los creyentes por la muerte de Jesús. No se celebra la Eucaristía, se espera el milagro de la resurrección. Y el Domingo de Resurrección o Domingo de Pascua se celebra la resurrección de Jesús luego de llevar 3 días muerto, culminando así la Semana Santa.